http://www.lostiempos.com/noticias/08-04-08/08_04_08_loc11.php
Dos polémicos informes recientemente aparecidos develan que los verdugos de Christian Urresti Ferrel (18), del grupo de los cívicos, que fue linchado durante los enfrentamientos del 11 de enero de 2007, permanecieron en el lugar del crimen incluso cuando se realizaba el levantamiento del cadáver, sin que nadie los detenga.
Los informes fueron elaborados por los dos policías en llegar a las calles Baptista y Mayor Rocha, sitio en el que Urresti fue victimado.
Los policías indican en su informe que uno de los testigos dijo que algunos de los victimarios se habían mezclado en medio de la multitud aglomerada alrededor del cuerpo.
En uno de los informes el policía informó que llegó por consejo de los presentes hasta la casa de un testigo, quien dio su identidad y número de teléfono celular. Sin embargo, sólo atinó a hacer algunos gestos y a señalar con la mirada al verdugo, que todavía estaba en el sitio cuando llegó la Policía y los paramédicos.
"Él no podía dar características específicas del autor solamente indicaba con señas de sus ojos "aquél es". Ni lo señalaba indicando que lo iban a reconocer y tomar represalias contra su persona", añadió el policía en su informe al comandante del PAC.
El uniformado calcula que llegó al lugar a eso de las 17:20 y que lo primero que hizo fue tomar contacto con los efectivos de la Unidad Táctica de Operaciones Policiales (UTOP), que se encontraban en el lugar del hecho. Entonces vio que el cuerpo de Urresti estaba tendido en la calzada, que todavía estaba la turba que presuntamente lo eliminó y el testigo que vio la ejecución.
Después de recoger el testimonio del vecino, el policía se acercó a la turba, donde los campesinos "quisieron reaccionar. Se encontraban enardecidos, todos portaban palos, armas contundentes. Indicaban los "cívicos mataron primero" a su compañero (Juan Ticacolque, cocalero muerto unos minutos antes), por qué ellos no iban a hacer lo mismo?".
EN FISCALÍA
Los documentos también establecen que la Fiscalía conoció de la declaración del testigo al mes de la muerte de Urresti. El primer reporte de los policías fue concluido el 6 de febrero de 2007 y enviado al comandante de la Patrulla de Ayuda y Auxilio al Ciudadano (PAC), Orlando Peralta. Mientras que el segundo se envió al jefe policial el 9 de febrero y a los pocos días a la fiscal asignado al caso, Lilian Ferrufino, según un familiar de la víctima.
La posibilidad de que la investigación del caso se cierre por falta de pruebas está latente hasta el 20 de abril, señalaron allegados de la víctima.
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