Saturday, April 21, 2007

INCONGRUENCIA

Es una palabra que los bolivianos vivimos día a día, pero que la gran mayoría posiblemente la entiende tanto como las palabras que están de moda, “oligarquía”, “autonomía”, “movimientos sociales”, “indigenismo”, “fascismo”, “mazismo”. Para no caer en lo redundante abrí mi diccionario de la real academia española y saqué la siguiente definición de la palabra incongruencia:

“Falta de acuerdo, relación o correspondencia de una cosa con otra.”

Y es que el régimen mazista ha sido incongruente desde su ascensión al poder ejecutivo, empezando por sus promesas electorales. Entre las incongruencias a destacar de esta filosofía endógeno fascista y racista que esta enfocada en tratar de sofocar a la democracia y al respeto de los derechos humanos en nuestra amada Bolivia, tenemos:

Incongruente es querer establecer la lengua quechua, aymará u otra lengua diferente al español como lengua nativa de Bolivia, por que la lengua nativa de Bolivia es el español o castellano si así lo prefieren. Asimismo incongruente es que el mismísimo Evo, quien promulga ser un nativo más originario de Bolivia que la mayoría de los Bolivianos que somos criollos; no sepa ni siquiera hablar su dice que lengua originaria quechua.

Incongruente es movilizar a miles de personas, a muchas de ellas a punta de chicotazos, para que mueran en las calles como simples peones en un juego de ajedrez político pidiendo la nacionalización de los hidrocarburos y la reversión de los activos de las empresas transnacionales a manos de YPFB. Para que luego le digan a esa pobre gente que después de sentarse en el silloncito presidencial la cosa no había sido como se mira desde las barricadas en la calle y no se puede así nomás nacionalizar a los hidrocarburos.

Re contra incongruente es oponerse en la cámara baja del legislativo mazista a aprobar las mejoras realizadas en los Petrocontratos por la cámara alta del mismo poder después de haberse demostrado por días la corrupción a raja tabla y los errores garrafales cometidos por los primeros por el simple hecho de ni haber ni leído los famosos contratos.

Incongruente es ascender al poder mediante la violencia, los bloqueos, la presión en las calles, echándole la culpa al gobierno de turno por el derramamiento de sangre. Para derramar sangre cuando los mismos sectores que lo apoyaban antes ahora usan las técnicas aprendidas del mazismo para presionar al régimen; incongruente además es que se le eche a la culpa ahora a los Sectores Sociales (SS) de esas muertes.

Incongruente son las penurias que sufren nuestros hermanos Bolivianos desesperados de salir del país donde reina el tirano que ellos mismos subieron al trono, lo que también es una incongruencia. Por que si, en efecto y aunque lo repitan incesantemente aquellos adiestrados en el mazismo, no es la clase pudiente Boliviana la que está emigrando, el la clase pobre, la que tenía en su mano el voto seguro del MAS. Eh incongruencia es que esa pobre gente tenga que pagar, léase comprar, un pasaporte; en US$ 570.- con tramitador, para que salga en 3 días cuando nuestro gobierno tan populista entrega carnes de identidad gratis y en menos de 1 día.

Incongruencia es poner la cara y rasgarse las vestiduras cuando le conviene hablarle “duro” a los Europeos y tirar al viento la mentada amenaza de pedirles visa que nunca implementaran como la famosa visa para los gringos; cuando lo que les interesa es obtener los votos de estos miles y yo me atrevería a decir millones, de Bolivianos que podrían salvarle el pellejo a Evo votando por su constituyente y después por el.

Incongruencia de tamaño baño es organizar una cumbre indígena para sacar un documento que formalice sus derechos diseque originarios ante la OEA, cuando sus lacayos más sanguinarios, los SS cocaleros del Chapare han practicado el genocidio de nuestros hermanos indígenas Yuquies en dicha zona; a quienes no se les permite ni entrar a las poblaciones gobernadas por el régimen.

Hay que rescatar eso si, en beneficio del régimen mazista, que para nada es incongruente el movilizar a sus SS chapareños y demás lacra para incitar la violencia en aquellos lugares que sostenía poder político y empezó a perderlo, como es el triste caso del sangriento 11-1 en Cochabamba o la ridícula movilización de estos SS en forma permanente en la hermosa ciudad de Sucre con el propósito de presionar a una Asamblea Constituyente para sacar una nueva constitución a medida de su propósitos excluyentes y racistas.